sábado, 12 de marzo de 2016

Comentarios sobre literatura juvenil



En general, lo que suelo escribir está orientado a otros adultos, incluso lo que escribo con humor. También suele ser así con lo que leo, por ejemplo, obras de Murakami.  La primera vez que me pidieron que escriba un cuento infantil no sabía ni por dónde empezar. Lo hice un par de veces, como un favor. En cuanto a la narrativa supuestamente orientada a los jóvenes, puedo decir que sentía curiosidad por el género, quiero decir, que deseaba conocer las características del mismo, qué tiene de particular, si lo tiene.
Hace poco me encontré con una lista de observaciones sobre ese tema, muy interesantes y reveladoras, y he querido compartirlas aqui.

- Ni los jóvenes leen solo literatura juvenil ni la literatura juvenil es solo para jóvenes.
-Tiene tanta madurez, contenidos y profundidad como la literatura adulta.
-Aprovecha muy bien las posibilidades de la red.
-Atrae a nuevas personas al sano hábito de la lectura.

Es verdad que una obra bien escrita es buena para todas las edades, como "El principito", o como "Juan Salvador Gaviota". Recuerdo cuando salieron las novelas de Harry Potter. Tantos adultos tenían entusiasmo por leerlas que incluso algunos compraron ediciones en inglés, porque salían antes que la traducción al español. Yo no he leído ninguna de las obras más recientes de este tipo de narrativa; me he limitado a ver  las películas, que por supuesto, no es lo mismo:  las de Harry Potter, las de la saga Crepúsculo, el filme "El dador de recuerdos", las de "Los juegos del hambre" y las de "Divergente" y "Maze runner" ( las que se filmaron hasta ahora). 
Tal vez a esta edad me he vuelto bastante serio. Algunas novelas que he leído recientemente son narrativamente destacables, obras de arte, pero sin finales felices. Supongo que si tuviera unos 25 años menos, me interesaría el relato de un adolescente en aventuras fantásticas o de ciencia ficción, aventurado a corregir a la sociedad, salvar a la humanidad, o tener una feliz relación de pareja. Lo que reconozco y valoro, es que esta clase de narrativa estimula la lectura, en tiempos en que resulta muy necesario lograr ese objetivo, además de las demás ventajas mencionadas. 
 

martes, 8 de marzo de 2016

¿Preferimos los libros en papel?



El tema de e-books vs. libros en papel permitiría discutir bastante, tal vez sin respuestas definitivas. Antes he comparado las caraterísticas de ambos formatos, ventajas y desventajas, además de mencionar el próximo libro de Murakami como parte de una "guera" entre formatos y distribuidores.
Hace poco he comprado un libro de cuentos de Murakami: "Sauce ciego, mujer dormida". Aunque hoy en dia son caros, ahorré para comprar uno. ¿Por qué uno en papel? Porque queria tener al menos una de las obras de ese autor, y ese es el verbo adecuado, tener. No solo leer, sino poseer, tocar, sostener, pasar paginas, colocar un señalador. Existen hace tiempo los marcos digitales, pero seguimos usando los portarretratos tradicionales. Podemos tener como fondo de pantalla cualquier pintura famosa, pero no seria lo mismo que tener una reproducción de la misma en la pared.
 No seria lo mismo comprar un e-book para leerlo en la pantalla de la pc o de un artefacto portátil.  Posiblemente lo haria, pero igualmente hubiera comprado al menos un ejemplar en papel de ese autor.  Si eres lector frecuente, de los que necesitan un libro cada mes o cada dos semanas, como yo, sabes de qué hablo. Necesitamos leer un poco cada dia, y podemos leer de dos libros a la vez, uno por la mañana, uno por la tarde. Tenemos más libros que todavia no hemos leído, pero serán los próximos. Los vemos, los cambiamos de sitio, los sostenemos. Nos hemos asegurado de que no nos falte lectura como si se tratara de asegurar comida antes de una tormenta. A un libro como objeto físico le asignamos un valor personal, y tiene una historia relacionada con la nuestra: cómo lo conseguimos, fuera compra o regalo, cuándo y dónde empezamos a leerlo, en qué momentos lo llevamos con nosotros.   Tal vez lo leímos gracias a la biblioteca pública, y porque otra persona lo había donado.
Vemos entonces que hay al menos dos clases de cuestiones por las que siguen siendo importantes los libros como objetos físicos. En primer lugar, las razones psicológicas, sobre todo las de quienes tenemos más de 30 o 40 años y crecimos con ellos. En segundo lugar, la posibilidad de que un texto llegue a todo ciudadano, incluso quien no haya podido comprarlo. Quien menos recursos tiene, más se beneficiará con el acceso a la cultura y la información, pues con dinero cualquiera podria ser idiota, pero con educación se puede dejar de ser pobre.
Soy consciente de que esta preferencia ocasiona también un dilema: cuando queremos dar a conocer nuestras obras, muchas veces pensamos como primera opción en la autopublicación, o sea, el formato digital. No todos los lectores tenemos tarjeta de crédito, o algún otro medio de pago electrónico. No todos los autores podemos afrontar los costos de una portada ilustrada por un profesional y las alternativas de promoción paga. Son grandes desafíos los que debemos superar, pero quienes necesitamos y amamos escribir, los enfrentamos con valor y con perseverancia; después de todo, ningún marinero se hizo experto en aguas tranquilas.